La hernia inguinal es una de las más comunes en cirugía general, especialmente en hombres. Aunque en muchos casos inicia como un abultamiento pequeño e indoloro, si no se trata a tiempo puede crecer, causar dolor e incluso complicarse.
Dr. Óscar Alejandro López Caro Especialista en Cirugía General y Hernias Abdominales 👨⚕️ Atención precisa, cercana y ética 📍 Agenda tu valoración con confianza
¿Qué es una hernia inguinal?
Es la salida de una porción del intestino o grasa abdominal a través del canal inguinal, una zona de la pared abdominal que es naturalmente más débil. Esto produce un bulto visible en la ingle o el escroto, que puede aumentar de tamaño con el esfuerzo físico, al toser o al estar de pie por mucho tiempo.
¿Cuáles son los síntomas?
Abultamiento en la zona inguinal (que puede desaparecer al acostarse)
Sensación de pesadez o ardor
Dolor leve que aumenta con el esfuerzo o al cargar peso
En casos más avanzados: dolor intenso, náuseas o vómito (signos de complicación)
¿Por qué se produce?
Las hernias inguinales pueden ser congénitas o adquiridas. Algunos factores que aumentan el riesgo son:
Esfuerzos físicos intensos o repetitivos
Obesidad
Tos crónica
Estreñimiento
Antecedentes familiares de hernias
¿Cómo se cura?
La única forma de curar una hernia inguinal es con cirugía.
¿Por qué no dejarla pasar?
Aunque al inicio una hernia puede parecer «inofensiva», con el tiempo crece, genera más molestias y puede complicarse (encarcelarse o estrangularse), poniendo en riesgo la vida. Por eso, la recomendación es operarla de forma programada y segura antes de que dé problemas mayores.